¿Estás planeando una visita a la hermosa ciudad de Marsella y no tienes claro cuántos días necesitas para disfrutarla al máximo? ¡No te preocupes! En este artículo descubrirás los detalles que necesitas saber para planificar tu viaje de la mejor manera posible.
Marsella tiene una gran cantidad de atractivos turísticos que no te puedes perder. Desde la famosa Basílica de Notre-Dame de la Garde hasta el encantador puerto antiguo, podrás disfrutar de espacios llenos de historia, cultura y sabor del sur de Francia.
Para una visita rápida, es posible conocer los principales lugares en un plazo de dos a tres días. Si tienes la oportunidad de extender tu estadía, recomendamos una visita de cinco a siete días, para tener la oportunidad de recorrer tranquilamente tus lugares favoritos, disfrutar de su gastronomía e incluso realizar alguna excursión cercana.
En definitiva, ¡existen opciones para todos los gustos y preferencias! Aprovecha al máximo tu tiempo en Marsella con un buen plan de viaje, ¡y disfruta de lo mejor de esta encantadora ciudad del sur francés!
Marsella, la segunda ciudad más grande de Francia, es un destino turístico popular en Europa. Con su rica historia, cultura y belleza natural, es difícil aburrirse en esta hermosa ciudad costera. Si tienes solo tres días en Marsella, aquí hay una guía para sacar el máximo provecho de tu tiempo.
Día 1: Comienza tu mañana visitando la Basílica de Notre Dame de la Garde, también conocida como La Bonne Mere, que ofrece una vista panorámica de la ciudad y sus alrededores. Después, dirígete al histórico barrio del Panier, donde encontrarás cafés, tiendas y galerías de arte. Visita el Museo de Historia de Marsella para conocer la historia de la ciudad. Luego, pasea por el puerto viejo y prueba la famosa bouillabaisse de Marsella para almorzar.
Día 2: El segundo día es perfecto para explorar la costa. Toma un ferry a Chateau d'If, una isla donde se encuentra la prisión que inspiró el libro "El Conde de Montecristo". Más tarde, visita las encantadoras calas como la Calanque de Sormiou, donde puedes nadar y hacer senderismo. Termina el día con un picnic en el parque nacional de Calanques mientras disfrutas de la vista del mar Mediterráneo.
Día 3: En tu último día, visita el Museo de Arte Contemporáneo para ver algunas de las mejores exposiciones de arte de la región. Después, dirígete a la Catedral de la Mayor y el Palacio de Longchamp, ambos emblemáticos de la ciudad. Para terminar tu día, disfruta un plato de tapas y vino en el tranquilo barrio de Cours Julien.
Marsella tiene mucho que ofrecer, incluso si solo tienes unos pocos días. Disfruta de la gastronomía, la cultura y la belleza natural mientras exploras esta fascinante ciudad.
Si tienes la oportunidad de visitar Marsella durante un fin de semana, ¡no te pierdas estos lugares imprescindibles!
En primer lugar, sorpréndete con la majestuosidad de la Basílica de Notre-Dame de la Garde, ubicada en la cima de una colina que ofrece una vista panorámica de la ciudad. En este lugar emblemático, disfrutarás de un ambiente tranquilo y relajante mientras admiras los mosaicos y estatuas que lo componen.
A continuación, pasea por el Puerto Viejo (Vieux-Port), el corazón de la ciudad que simboliza su historia y su modernidad. Aquí puedes disfrutar de una amplia variedad de actividades, incluyendo el turismo marítimo, la pesca y excursiones en bote. Un lugar perfecto para disfrutar del ambiente cosmopolita de la ciudad.
No puedes irte de Marsella sin probar su gastronomía, así que te sugerimos visitar el Mercado de Noailles. Allí podrás encontrar una amplia variedad de productos frescos y locales, como especias, pan, frutas, verduras y pescado. Un lugar indispensable para descubrir los sabores típicos de la región.
Finalmente, te recomendamos que visites el Château d'If, ubicado en una isla frente al Puerto Viejo. Este castillo construido en el siglo XVI es famoso por ser uno de los escenarios principales de la obra literaria "El Conde de Montecristo" de Alejandro Dumas. Sorpréndete con su arquitectura y su historia mientras disfrutas de la brisa del mar Mediterráneo.
En resumen, estos son los lugares esenciales que debes visitar en Marsella en 2 días: la Basílica de Notre-Dame de la Garde, el Puerto Viejo, el Mercado de Noailles y el Château d'If, ¡no te los pierdas!
Marsella es una ciudad con una amplia oferta cultural y turística que puede ser visitada en cualquier época del año. Sin embargo, existen algunas particularidades que pueden influir en la elección de la fecha ideal para viajar.
Si lo que buscas es disfrutar del sol, las playas y el clima cálido, la mejor época para visitar Marsella es en verano, entre los meses de junio y septiembre. Durante esta temporada, las temperaturas son agradables y las playas de la ciudad se llenan de bañistas y turistas.
Por otro lado, si prefieres hacer turismo cultural, visitar museos y galerías de arte, primavera y otoño son las mejores opciones, ya que en estos meses el clima es más suave y las multitudes son menores. Además, podrás asistir a varios eventos que se organizan en la ciudad como el Maratón de Marsella o el Festival Internacional de Cine.
Si eres un aficionado del deporte, una buena opción para visitar Marsella es durante el invierno, ya que en esta temporada se disputan algunos deportes de invierno en las montañas cercanas, y se pueden disfrutar de eventos como el Tour de Provence (una carrera ciclista) o el Open 13 (un torneo de tenis).
En cualquier caso, Marsella es una ciudad que ofrece alternativas interesantes todo el año, por lo que la elección de la fecha dependerá de tus preferencias personales y de lo que quieras experimentar en tu viaje.
Si planeas visitar la ciudad de Marsella, hay ciertos lugares y actividades que no puedes perderte.
Uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad es la Basílica de Notre Dame de la Garde, que ofrece una vista panorámica impresionante de la ciudad. Además, otra visita obligada es el puerto viejo de Marsella, donde puedes encontrar una gran cantidad de restaurantes y tiendas.
Otra experiencia única que no deberías perderte en Marsella es probar la comida local, especialmente el Bouillabaisse, una sopa de pescado típica de la región. También puedes disfrutar de un día en la playa, ya que la ciudad cuenta con algunas playas hermosas, como la Playa del Prado y la Playa de los Catalanes.
Si te interesa la historia y la cultura, puedes visitar el Museo de Historia de Marsella y el MuCEM, un museo dedicado a la cultura mediterránea. Además, puedes hacer una excursión al Parque Nacional de Calanques, un impresionante parque natural ubicado en las afueras de la ciudad.
Finalmente, si visitas Marsella en verano, no te pierdas el Festival de Jazz de la ciudad, uno de los eventos más importantes de la región.