La Cala Pola es una de las playas más hermosas de la Costa Brava, situada en la zona de Calella de Palafrugell. Este lugar es ideal para descansar, tomar el sol y practicar deportes acuáticos, pero para llegar allí es necesario seguir algunas indicaciones.
Primero, es importante tener en cuenta que la Cala Pola no cuenta con un acceso directo en coche, debido a su ubicación en una zona rocosa y protegida por acantilados, por lo que es recomendable dejar el vehículo en el aparcamiento público más cercano y seguir a pie.
Una vez estacionado el coche, hay que caminar por un sendero que atraviesa una zona boscosa y termina en una escalera de piedra, desde la cual se puede bajar hasta la playa. Este recorrido es de unos 15 minutos aproximadamente y tiene vistas impresionantes.
Es importante llevar calzado cómodo y protección solar, ya que en ciertos tramos del sendero hay rocas y ocasionalmente puede haber ramas o plantas en el camino. También es recomendable llevar algo para beber, ya que la caminata puede ser exigente en días calurosos.
Al llegar a la escalera, es importante estar atentos y tomar las precauciones necesarias al bajar, ya que las piedras pueden estar resbaladizas en algunos puntos. Una vez abajo, se puede disfrutar de la belleza de la Cala Pola y su agua cristalina.
A la hora de regresar, es recomendable hacer el mismo camino de vuelta para evitar extravíos. También se puede optar por seguir el camino de la costa y visitar otras playas cercanas, como la Cala del Golfet o el Port Bo.
En conclusión, acceder a la Cala Pola requiere cierto esfuerzo, pero las vistas y la experiencia valen la pena. Seguir estas indicaciones paso a paso garantizará una visita segura y cómoda a esta playa de ensueño.